Mirar en la estación

Mirar en la estación Si sabes mirar, puedes aprender mucho de la naturaleza humana observando a la gente en una olvidada estación de tren entre Mariúpol y Kiev. Abre bien los ojos: quizá veas el rostro ilusionado de Natalia, siempre un poco antes de las siete de la tarde, cuando pasa el tren hacia la capital. O tal vez te fijes en Klara, que baja a las vías a ver llegar a los héroes. Cada día, hay muchos en la estación que los aguardan. Vendrán esta semana: el alto mando lo ha confirmado, pero nadie sabe cuándo, porque los rusos no están dejando pasar convoyes ucranianos. Ya no hay tranquilidad ni para los heridos o los moribundos. Dime, ¿qué ves en los ojos de Natalia? ¿No te das cuenta de que es una mujer enamorada, que ha sufrido un enorme shock cuando se han llevado al frente a su marido, Demyan? Quedan unos minutos. A Klara, a Natalia y a todos los vecinos les duele el cuello de levantar la cabeza y mirar a lo lejos. Quieren que pase el tiempo, que la máqu...